Por José Carlos Páez Romero //
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En este artículo quiero hacer algunas reflexiones a propósito de las últimas novedades en relación con la explotación de los derechos audiovisuales de las competiciones futbolísticas en España, con ocasión, en particular, del acuerdo adoptado por la LNFP el viernes, 6 de febrero.
En su acuerdo, la LNPF insta al Gobierno a que “dicte la normativa que en lo sucesivo regule la venta centralizada de los derechos de televisión de las competiciones en las que participan los equipos del fútbol profesional, de acuerdo con el compromiso reiteradamente manifestado por el Consejo Superior de Deportes”. La regulación solicitada del Gobierno debería incluir, según el acuerdo, “tanto el método para la comercialización, como el sistema para el reparto de los ingresos que esta produzca”.
Es más, en su petición la LNFP subraya, además de la gravedad de la situación y la necesaria actuación de urgencia por parte del Gobierno: (i) el acuerdo de los clubes de fútbol profesional para que sea el Gobierno quien establezca los criterios de reparto de los ingresos televisivos, de acuerdo con el interés general; (ii) la oportunidad que ofrece el hecho de que los clubes y operadores han respetado la no suscripción de acuerdos que imposibilitarían la aplicación de una normativa de venta centralizada; y (iii) que las instituciones de la Unión Europea se han pronunciado a favor de la venta centralizada de los derechos de televisión de las competiciones de Primera, Segunda División y de la Copa de S. M. el Rey.
Por otro lado, a finales del pasado año, FASFE cumplió con lo que había anunciado y presentó ante la Dirección General de la Competencia de la Comisión Europea una denuncia por el desigual reparto de los ingresos derivados de los derechos audiovisuales. En línea con la solicitud que la LNFP ha hecho al Gobierno, FASFE, bajo el epígrafe “Resultado esperado de la intervención de la comisión”, afirma que la solución “no puede pasar sino por el establecimiento de un sistema de venta de derechos televisivos de forma centralizada”.
Finalmente, también en materia de explotación de derechos de televisión del fútbol, el Tribunal Supremo se ha pronunciado en el litigio que enfrentaba a Mediapro y Sogecable en relación con un acuerdo de 24 de julio de 2006 por el que se articulaba la cooperación entre ambas empresas para explotar conjuntamente los derechos de retransmisión de los partidos de fútbol de la Liga española.