La Federación de Fútbol de Irak (IFA) eligió un nuevo presidente este sábado en un intento de evitar una suspensión indefinida por parte de la Federación Internacional (FIFA), tras posponer la elección en varias ocasiones.
Los miembros del comité general, compuesto por presidentes de los clubes y funcionarios deportivos provinciales, entre otros, votaron por 42-33 en favor de ascender al vicepresidente Abdul khaliq Massud frente a la permanencia del jefe de la IFA, Najeh Hmoud, según un periodista de la AFP que sigue la elección.
También se eligió quién asumirá los dos cargos de vicepresidente y ocho plazas en la junta, en una votación que, tras la sentencia del Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), debía haberse celebrado en abril pero se terminó realizando este sábado.
Las elecciones para la junta directiva de la IFA han estado plagadas de acusaciones de intervencionismo político que han ralentizado el proceso y crispado al organismo rector del fútbol mundial.
Las primeras elecciones se celebraron en julio de 2011 y fueron anuladas por el TAS por las acusaciones de manipulación, mientras que su repetición se ha ido demorando en los últimos meses por diversas causas y amenazas de violencia.
Los múltiples retrasos llevaron tanto a la FIFA como a la Confederación Asiática de Fútbol (AFC) a amenazar con la “inmediata e indefinida suspensión” de la IFA si la votación no se hacía a finales de mayo.
Ambos organismos también dijeron en una carta que en los días previos a la votación prevista para abril “los representantes de la AFC recibieron amenazas telefónicas durante su misión”.
Pese a que la FIFA insiste que el fútbol debe ser independiente de la política, la política iraquí impregna casi todo, incluido el deporte.
En julio de 2013, la FIFA prohibió a Irak acoger partidos amistosos internacionales debido a un repunte de la violencia retractándose de una decisión tomada tres meses antes que permitía al país celebrar dichos partidos.
El equipo nacional no pudo clasificarse para el Mundial de Brasil, que se disputa del 12 de junio al 13 de julio, y no ha podido repetir el sorprendente éxito cosechado en 2007 cuando se proclamaron campeones de la Copa Asia, dando al país un extraño símbolo de unidad mientras se sumergía en la brutal guerra entre sunitas y chiitas.