Por Ramón Fuentes //
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Ya es una realidad y la LFP ve cumplido el sueño. Este ultimo día de abril es histórico para el fútbol profesional española. El Consejo de Ministros da luz verde a la venta centralizada de los derechos de televisión del fútbol. Una aprobación que no sólo implica el regreso a un modelo de negocio que nunca debió abandonar el fútbol español. Las constantes guerras entre los operadores de televisión por el «maná» del fútbol no han hecho sino perjudicarles. Además el hecho de aprobarse en estas fechas permite todavía la venta del producto fútbol como un todo desde la próxima temporada 2015-2016, algo que como contamos ya aquí en IUSPORT lo empezaban a poner en duda algunos clubes. La venta nacional como internacional.
Y esto no supone otra cosa que se abre la puerta a poder alcanzar desde la próxima campaña esos añorados 1000 millones de euros anuales que llevan tiempo defendiendo desde la patronal del fútbol. Ya explicamos la semana pasada aquí en IUSPORT; que sólo esos 300 millones de incremento respecto al contrato actual suponen la mitad de la deuda que actualmente mantiene el fútbol español con la Agencia Tributaria.
No sólo eso, este Real Decreto implica también un espíritu colectivo. Ya nadie podrá hacer la guerra por su parte, todos irán de la mano a la hora de defender los intereses del fútbol. Y quien no lo haga deberá asumir las posibles sanciones, dada esta nueva situación de contar con el respaldo legal. Estamos ante un nuevo reparto del «pastel» del fútbol donde los grandes seguirán siendo los mejores pagados pero existe un mayor espíritu colectivo, en la línea de lo que hasta ahora era el acuerdo firmado por el G34 (grupo de clubes unidos bajo la figura de Javier Tebas, actual presidente de la LFP y donde estaban incluidos Real Madrid y Barcelona).
En esta nueva situación que se dibuja desde hoy, los dos grandes, Real Madrid y Barcelona, sufrirían una pequeña reducción respecto a las cantidades que están cobrando actualmente. Ambos cederán cerca un 15% de sus ganancias que destinarán a los clubes de la Liga Adelante. Numericamente hablando significa que pasarán de los 140 millones que perciben en la actualidad a ingresar alrededor de 125 millones de euros por temporada. Porque si algo tiene este nuevo Real Decreto es un reparto más equitativo de los ingresos. Al margen de Real Madrid y Barcelona; de la cantidad restante en el pastel un 50% se repartirá a partes iguales entre todos los clubes y el otro 50% se hará en función conforme a conceptos como la clasificación en la última temporada, clasificación histórica de los clubes o sus audiencias de televisión.
El resto del fútbol esta muy molesto y habrá que ver su reacción
Pero, por mucho que se quiera vender que existe unidad en todo el mundo del fútbol, nada que ver con la realidad. Salvo los clubes profesionales el resto de estamentos como la RFEF, jugadores, federaciones territoriales, Arbitros etc,,,consideran que este texto ve la luz bajo un total oscurantismo. Nadie salvo la LFP y algunas personas más han tenido acceso al borrador. Y ya avisamos que habrá que esperar su reacción porque puede pasar de todo. Y puestos a especular podría incluso pasar por una medida drástica. Además del oscurantismo, el segundo punto de conflicto viene en el reparto. La idea inicial pasa porque en este nuevo Real Decreto implica que, de la cantidad total que se ingrese, alrededor del 85% irá para los clubes de Primera y la propia LFP y un 10% para los clubes de Segunda. Pero lo conflictivo esta respecto al resto de cantidades de repartir, especialmente en lo relativo a la RFEF. El estamento federativo tenía previsto percibir cerca de un 2,5% de este nuevo contrato; algo que choca con los intereses del estamento federativo que solicita además el 1% que estaba previsto destinar a otros deportes e incluso el 1% que está previsto que perciba el CSD. No solo la RFEF, también sus federaciones territoriales y la propia AFE, considera inadmisible que se destine un dinero a otros deportes cuando el fútbol no profesional es el primero que lo necesita.
Pero no es está la única salvedad que quedó patente en la última reunión de Junta directiva de la RFEF celebrada el lunes pasado. Otro de los puntos de discrepancia radica en el órgano regulador de esta venta centralizada de los derechos; y también aquí han pedido participar Federación y Sindicato. Y esto es considerado también un tema capital. Una vez que finalmente ha visto la luz, habrá que ver como reaccionan el resto de estamentos de fútbol. Igual su aprobación, además de ser una gran noticia, puede dar pie a un nuevo terremoto en el fútbol español