Por Ramón Fuentes //
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Lo normal es que excluya de la competición a ambos equipos cuando puedan jugar en Europa. Esta siguiendo con detenimiento el proceso abierto por el supuesto amaño del encuentro del 21 mayo 2011.
La UEFA no está al margen del proceso abierto actualmente en nuestro país por el presunto amaño del Levante- Zaragoza del 21 de mayo del 2011 que acabó con la victoria maña por 1-2 y que significó el descenso del Deportivo a la Segunda división. Más después de la decisión adoptada por la Fiscalía Anticorrupción el pasado 15 de diciembre de imputar a 41 personas.
Ese día el fiscal Alejandro Luzón denunció oficialmente al Zaragoza y a más de cuarenta personas entre los que se encuentran el entonces presidente de equipo maño, Agapito Iglesias, el técnico Javier Aguirre y hasta un total de 36 jugadores; incluidos los capitanes de ambos equipos. Tanto en el caso de Gabi entonces del conjunto maño como Ballesteros en el Levante. Todos ellos se exponen a castigos de penas de cárcel de seis a cuatro años además inhabilitaciones de uno a seis años.
Pues bien, al margen de todo el proceso y las sanciones finales que imponga la justicia ordinaria, está imputación también tiene una consecuencia inmediata en UEFA. Consecuencia que pasa por la exclusión de ambos equipos de las competiciones europeas en la primera temporada que cualquiera de los dos equipos logren la plaza para poder participar tanto en la Liga de Campeones como en la Liga Europa. En el caso del Zaragoza en la actualidad esta opción, al encontrarse en Segunda división, sólo sería posible si lograra adjudicarse la Copa del Rey. En el caso del Levante, podría ser tanto por posición en la clasificación en Primera división como adjudicándose en el torneo del KO.
Si algo viene demostrando la UEFA en estos últimos años es su posición de total dureza y oposición sobre todos los posibles amaños de partidos. Ya sea en las ligas naciones europeas que dependen del organismo europeo. Como en cualquiera de sus dos competiciones. El caso más conocido es el Metalist ucraniano. Lo mismo ha sucedido con los equipos turcos del Fenerbahe y Besiktas.
Porque la UEFA no necesita que la justicia ordinaria del país de origen considere finalmente como delito ese presunto amaño. En el momento que hay suficientes indicios o una imputación, como es el caso del Levante-Zaragoza de la Liga española, ya considera que atenta contra la integridad deportiva y que hay elementos suficientes para sancionarlos.
Así pues, la primera ocasión en la que el Levante o Zaragoza puedan jugar competiciones europeas, lo normal es que se encuentren con la negativa de la UEFA a que puedan hacerlo debido a este proceso judicial que continúa abierto en España y que afecta a representantes de ambos equipos. Luego, además de la sanción de la justicia ordinaria, se sumará esta exclusión con la importante repercusión económica que implica.
Porque tanto la participación en la Liga Europa y, especialmente en la Liga de Campeones, es una fuente de ingresos importantísima para los clubes. Especialmente para aquellos que juegan de forma ocasional, como es el caso del conjunto maño o valenciano.
Lo cierto es que UEFA no va a hacer nada oficial por el momento pero está pendiente de cómo evoluciona en cada momento este presunto «amaño» en el fútbol español.
