El presidente de Caza suspende la Asamblea General tras ser denunciado ante el CSD

Los asambleístas del mundo de la caza se vieron sorprendidos el pasado viernes 16 con la aparición de un aviso en la página web de la Real Federación Española de Caza donde se anunciaba con carácter de urgencia que la Asamblea General prevista para el sábado quedaba suspendida, dejando pendiente de designar una nueva fecha. Efectivamente, el presidente Andrés Gutiérrez había convocado la Asamblea General para este sábado día 17.

En el breve comunicado de la Federación Española no se hacía referencia a las razones que han podido provocar este aplazamiento, limitándose a informar en su página web que la Asamblea General “se suspendía por motivos de fuerza mayor”.

Sin embargo, en círculos cercanos a los asambleístas se comenta que es posible la que suspensión tenga que ver con la presunta presentación, esa misma mañana, de una denuncia en el Consejo Superior de Deportes, causada por la situación financiera y patrimonial de la Real Federación Española de Caza. Situación financiera que debería tratarse al darse a conocer la Memoria Anual de la entidad en la asamblea suspendida.

También se da la circunstancia de que al parecer el Juzgado de Instrucción nº 50 ha dictado auto de fecha 08 de mayo por el que acuerda continuar las Diligencias Previas abiertas contra Andrés Gutiérrez Lara, actual presidente de la RFEC, por los trámites del Procedimiento Abreviado debido a que se desprende de todo lo actuado e investigado que los hechos denunciados por Mutuasport podrían ser constitutivos de supuestos delitos de estafa, administración desleal y falsedad en documento mercantil. Concediendo al Ministerio Fiscal y a Mutuasport 10 días para que formulen escrito de acusación y solicitar apertura de juicio oral. Aunque este auto pudiera ser recurrido.

El F-X, grupo que integra a ocho federaciones autonómicas de caza, ha dejado patente en todo momento su total desacuerdo con la gestión que está llevando a cabo el presidente de la RFEC, Andrés Gutiérrez, un presidente que, además, es el Gerente de la RFEC.

La denuncia del F-X pone en conocimiento del CSD la grave situación financiera y patrimonial de la RFEC, en la que estiman que puede haber presuntas irregularidades contables en las liquidaciones presupuestarias sometidas a la aprobación de la Asamblea General de la RFEC.

Balance de Pérdidas y Ganancias

Marca informa que, en cuanto al Balance de Pérdidas y Ganancias correspondiente al ejercicio 2013, desde el grupo F-X se denuncian una serie de irregularidades en materia de ingresos por licencias. A este respecto cabe destacar como en el informe presupuestario se detallan los siguientes ingresos: Alta competición: 83.156,37 euros; actividades estatales: 434.547,43; gestión federativa: 963.025,49. Total: 1.480.729,29 euros.

Por los datos obrantes en la Memoria, el F-X apunta a que se han expedido 131.251 licencias de manera conjunta y con cuota de la RFEC, y ello aritméticamente supondría el siguiente ingreso: 131.136 licencias conjuntas por 4,30 euros para un total de 563.884,80 euros. Además hay otras 115 licencias especiales de la RFEC por 13,25 euros de cuota que suman 1.523,75 euros. Total: 565.408,55 euros.

Según el F-X, en este capítulo de ingresos aparecen contabilizadas irregular e ilegalmente, todas las licencias expedidas por las federaciones territoriales, ya sean licencias nacionales o de carácter autonómico. Este hecho es absolutamente improcedente por cuanto las licencias expedidas de esa forma por las federaciones autonómicas de ninguna manera deben ser consideradas como un ingreso, ya que no devengan cuota federativa nacional, exclusivamente cuota autonómica, razón por la que la RFEC no es acreedora frente a ninguna territorial por este concepto.

El FX destaca igualmente que el ejercicio económico del año 2013 arrojaría unas pérdidas de 796.611,96 euros, algo que el denunciado Andrés Gutiérrez se niega a reconocer, y mucho menos a someter al criterio de la Asamblea General, debido a que acreditan que la RFEC se encuentra en situación de quiebra.

Continúa por tanto la polémica en una entidad que está perjudicando seriamente la imagen de una actividad que debería defender, al ser el fin último para el que se creó.