Aunque Agapito Iglesias mantiene en simultáneo dos negociaciones abiertas, todo parece indicar que
la oferta presentada por el grupo que lidera de Mariano Casasnovas será la que al final prosperará.
Por diversos motivos, la otra oferta, de un inversor alemán, adelantada por El Periódico de Aragón
el pasado domingo, tiene pocas posibilidades.
Casasnovas decía ayer al citado medio: «Se puede firmar en breve», después de haberse reunido los
ocho empresarios interesados en comprar todo o parte del paquete accionarial del soriano, en torno
al 94%.
Todo apunta a que la propuesta de este grupo es la que más seduce aún al dueño de la SAD, dice el
medio antes citado, porque implicaría una continuidad, no solo por la permanencia de los consejeros
Checa y Cuartero, hombres de absoluta confianza para Agapito, dentro del club, quizá también por más
aspectos, como la posibilidad de que la venta sea parcial.
Lo que no ha quedado claro es la puesta a disposición de Agapito, por parte del grupo, del aval de
hasta ocho millones para acabar la temporada y para el compromiso de entrada en la entidad.
«No es claramente un aval, sino una declaración de solvencia económica de hasta ocho millones. Y por
ahí no existe ningún problema», aseveró Casasnovas, que también negó que hubiera habido disensiones
en ese grupo.
Con todo, este grupo mantenía a última hora de anoche su optimismo, esperando firmar «muy pronto».
El grupo alemán
Mucho menos dúctil es la opción del fondo inversor alemán en la que Javier Láinez sería la cabeza
visible, después de que el exdirectivo zaragocista trabajara en una opción con capital mexicano que
se ha quedado muy retrasada.
El grupo alemán avisa de que la fecha límite es este viernes y advierte de que la entrada en el club
implicaría el cambio en todas las estructuras, la salida de los ejecutivos de la entidad que Agapito
Iglesias quiere que sigan y también que el soriano no se quede ningún porcentaje de las acciones.
En el fondo, Láinez, que tendría un puesto de relevancia en el club si esta opción alemana cristaliza, no es del agrado del actual dueño de la SAD, ya que ha sido una de las cabezas visibles de la oposición al soriano en los últimos años.
El paso de las horas debe aclarar un futuro en el que está en juego la propia supervivencia del Real
Zaragoza, en una muy delicada situación económica, derivada, precisamente, de la gestión de Agapito
Iglesias.
Antes del 30 de junio, cuando el Zaragoza necesita más de 5 millones para acabar la temporada, es la
fecha límite para que Agapito se marche del club o bien para que orqueste una salida con posibilidad
de retorno.