El director de la Policía contradice al Gobierno sobre el estado de la seguridad ciudadana

Las declaraciones del director general de la Policía, Ignacio Cosidó, acerca de la situación actual de la seguridad ciudadana, hechas en el acto de presentación del proyecto de Ley de Seguridad Privada, han puesto de relieve lo innecesario que es el otro proyecto ley, el de Seguridad Ciudadana, contestado por gran parte de la sociedad española, nos atrevemos a afirmar que la mayoría, y lo extralimitado del de Seguridad Privada.

Por el contexto, cabría admitir la rectificación del Ministerio, en el sentido de que el director  general se refería al proyecto de Ley de Seguridad Privada, no al de Seguridad Ciudadana, pero el diagnóstico realizado por el alto cargo de Interior tiene valor en sí mismo y deja, a la postre, sin fundamentación, unos proyectos de ley tan regresivos en un régimen que presume de democrático.

Cosidó ha admitido este martes que todos los datos apuntan a una mejora de la seguridad y que el comportamiento de los manifestantes en las protestas es ejemplar en la mayoría de los casos. Dijo que “nunca en España hemos tenido un mayor número de manifestaciones y una menor necesidad de acción de las fuerzas policiales como en estos momentos”.

Según puede verse en el vídeo que ofrece ABC.ES, Cosidó declaró que “hay una mejora de la seguridad objetiva y subjetiva. En absoluto la ley de seguridad ciudadana responde a una demanda ciudadana.  Todo lo contrario”.

Y claro, saltan las contradicciones. A pesar de ese diagnóstico «oficial», el Gobierno emprende  iniciativas como los repetidos proyectos de ley de Seguridad Ciudadana y Seguridad Privada, y actos puntuales como la adquisición de un camión-botijo para lance agua a presión para contrarrestar las manifestaciones que el propio dirigente de Interior reconoce pacíficas.

Como es conocido, el clamor es general contra un proyecto de Ley de Seguridad Ciudadana que establece multas de 100 a 1.000 euros a quienes practiquen juegos o de actividades deportivas en espacios públicos no habilitados para ello; pero también contra una Ley de Seguridad Privada que otorga «auctoritas» a los vigilantes privados en los espacios públicos.

Y ya si nos detenemos en datos estadísticos, el asunto clama al cielo. El mismo director general de la Policía dio el número de protestas que ha habido en este curso. A lo largo del año se han celebrado más de 6.000 manifestaciones con presencia policial. En 84 de esas manifestaciones se ha producido algún tipo de incidente y en 18 de ellos ha sido necesario utilizar la fuerza policial, según Cosidó.

“Creo que esto demuestra dos cosas: un sentido de la responsabilidad y del respeto a la convivencia por parte de los ciudadanos que creo que es digno de destacar”, ha reconocido. Cosidó ha aludido también a la última encuesta del CIS, según la cual la seguridad ciudadana ha desaparecido como una de las preocupaciones de los ciudadanos.

Ahí es nada.

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