Por Javier Rodríguez Ten //
_________________________________________________________________________________________
Está revolucionado el patio por el hecho de que los jugadores del fútbol profesional español no vayan a cumplir sus hipotéticas sanciones (porque todavía no están sancionados) este fin de semana. Lo normal es que si en una jornada cometes una infracción, en la siguiente comienzas el cumplimiento (cautelares aparte). Y estamos acostumbrados a eso.
Ciertamente, si no fuera así nada pasaría. Si en vez de un procedimiento casi sumarísimo en el que en una semana puede haber incluso ¡tres escritos y tres resoluciones! (alegaciones al acta, resolución del comité de competición, recurso de apelación, resolución del comité de apelación, recurso al Comité Español de Disciplina Deportiva con petición de suspensión cautelar y resolución de la cautelar), con la evidente merma de garantías, hubiera un procedimiento más prolongado que culminara (por ejemplo) a los quince días, nos acostumbraríamos a que los jugadores cumplieran las sanciones contra el tercer rival, y lo que es igual para todos no genera ventaja para nadie.
Dicho esto, aquí nadie se ha ido de «puente». El Comité de competición sanciona POR JORNADAS y no por partidos, de manera que hasta que no finaliza el plazo de alegaciones del último partido de una jornada no se pueden reunir y resolver. En esta semana no existen días sin competición, porque coinciden la jornada del «puente» con la anterior entre semana… y con los partidos distribuidos en tres o cuatro días en cada una de ellas por necesidades audiovisuales. Así que, lo mejor para evitar agravios comparativos (este jugador no lo cumple porque cuando se lo han comunicado ya ha jugado el partido, pero este otro sí; este entrenador no sabe si puede alinear o no a un jugador hasta minutos antes del partido, pero este otro va con la convocatoria diseñada, etc.) la decisión de sancionar la semana que viene puede ser discutible, pero no es descabellada ni desde luego «ilegal».
Así que… nada de «puente». Y además, si el viernes hubiera sido día laborable, el resultado habría sido el mismo.