Lo que no consiguió Rosell en meses, lo gestó Bartomeu en 16 horas: el consentimiento del padre de Neymar para que hiciera públicos los detalles del traspaso.
Parece difícil de creer, pero eso es lo que ha dado a entender el exvicepresidente hasta ayer y hoy presidente del FC Barcelona. Acompañado de Raúl Sanllehí, director del área de fútbol, el nuevo mandatario azulgrana anunció que el padre del jugador le ha autorizado a desvelar las cifras del contrato.
En su primera comparecencia como presidente del Barcelona, Josep María Bartomeu ha querido hacer un ejercicio de transparencia, distanciándose así del anterior presidente, como si se tratase de alguien que acaba de aterrizar en Cam Barça.
El diario El Mundo informó el pasado lunes de que la operación de Neymar tuvo un valor de 95 millones. El propio club admitió este viernes 86.
La diferencia son nueve millones, que corresponden, según el mismo periódico, a la cifra que el club debía pagar si no jugaba los dos amistosos comprometidos con el Santos y que por tanto formaban parte de la valoración hecha en el momento de la firma del traspaso.
Como el Barça subraya su deseo de cumplir ese acuerdo, resta nueve millones a los 95, aunque al tiempo destaca que acabará pagando dos más porque espera que Neymar sea finalista en breve del Balón de Oro. Es decir, concluye El Mundo, el Barcelona asume, como mínimo, una inversión de 88,2 millones por el ‘crack’ brasileño, frente a los 57,1 que había admitido hasta ahora.
Por otro lado, el mandatario azulgrana aseguró que agotaría el mandato hasta 2016 y que no dimitiría ni en el supuesto de ser imputado en la causa penal que tramita el Juez Ruzz en virtud de la querella del socio Jordi Cases.
Sobre este particular, el querellante adelantó este viernes que se tomará el fin de semana para reflexionar acerca de si amplía finalmente a querella contra los entonces vicepresidentes Bartomeu y Faus, ambos firmantes de la mayoría de los contratos con Neymar, conjuntamente con Sandro Rosell.
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