El diario EL MUNDO de este lunes desvela que el Fútbol Club Barcelona ha pactado por diversos conceptos unos emolumentos para Neymar, tanto los fijos como los variables, que pueden alcanzar los 15 millones, lo que supone que de facto percibe cuatro millones más que la gran estrella del equipo, Lionel Messi, que cobra unos 11 millones al año -sin incluir las gratificaciones extra por títulos-.
Esto explica la ansiedad del presidente azulgrana en reconducir el reciente rifirrafe entre Messi y el vicepresidente del club Javier Faus, acerca de la revisión del contrato del astro argentino, cuatro veces Balón de Oro (2009, 2010, 2011 y 2012), cuya ficha ha sido superada por un recién llegado que promete pero que aún no ha ganado ningún gran título a nivel de clubes.
Como saben los lectores de IUSPORT, Messi reaccionó de forma tan inusual en él tras unas declaraciones del vicepresidente económico, en las que dijo que no entendía que Messi pudiera pedir otra renovación de su contrato.
Sandro Rosell intentó aplacar sin éxito el embrollo en la comida navideña con los medios de comunicación. “Messi es el mejor del mundo y debe cobrar como tal”, señaló el presidente del Barça, al tiempo que dejaba las puertas de su despacho abiertas para tratar su renovación.
Sin embargo, y aquí se ve la fisura en la directiva azulgrana, Faus rechazó esta posibilidad. “No veo motivo para mejorar el contrato a un señor al que ya se lo mejoramos hace seis meses”.
Las revelaciones de El Mundo explican por qué Sandro Rosell ordenó rápidamente a su equipo que recondujera la crisis con Messi, haciéndole llegar el mensaje de que su contrato «por supuesto» que se va a revisar al alza.
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