Tras conocer la noticia de la venta del paquete accionarial por parte de Gorka Arrinda, los jugadores del Bilbao Basket han desconvocado la huelga, cuyo comienzo estaba previsto precisamente para este fin de semana.
La plantilla concede así una tregua a los nuevos gestores para que reconduzcan la nave, mediante los patrocinios prometidos.
El equipo ha viajado a Barcelona, donde mañana disputará el partido previsto contra el Barcelona.
En caso de haber mantenido la huelga, las consecuencias a nivel deportivo habrían sido catastróficas: el partido de habría dado por perdido al Bilbao Basket, que también recibiría una multa económica. Y lo que es más grave, si se producía una segunda incomparecencia, se le habría decretado el descenso administrativo, lo que hubiese dado al traste con cualquier expectativa de reflotar la entidad.
El club tiene una deuda de 6 millones de euros, acumula atrasos en los pagos a los jugadores y al resto de trabajadores.