La ECA, por medio de su presidente, Karl-Heinz Rummenigge, ha emitido un comunicado de prensa en el que se remita a las declaraciones de su presidente, como respuesta a la reunión celebrada hoy en Doha en relación al Mundial de Qatar 2022, y donde se está dilucidando si disputar tal competición en invierno, concretamente entre los meses de noviembre y diciembre.
El alemán, como máximo representante de la Asociación de Clubes Europeos declara que la noticia “no le parece una sorpresa, era incluso esperada”. Añadiendo que “para la familia del fútbol el cambio de fecha del Mundial de 2022 presenta una dificultad”.
Por otro lado, hace hincapié sobre el hecho de que todos los partidos y los calendarios de las competiciones de 2022/23 deberán ser modificados para “acomodar tal torneo”, lo que conllevará el necesario compromiso e involucración de toda la familia del fútbol. Pero es tajante al finalizar tal declaración estableciendo que “no se podrá esperar que los clubes europeos y las ligas asuman los costes de tal cambio de fecha. Esperamos que los clubes sean compensados por el perjuicio que esa decisión final causaría”.