El TMS, el famoso sistema de correlación de transferencias que adquirió eco internacional el pasado 1 de septiembre a raíz del “no” fichaje de David de Gea, vuelve a aparecer en escena, ahora con los derechos de formación y el mecanismo de solidaridad.
Así lo explica Ramón Fuentes en su columna de IUSPORT de este lunes. El pasado 4 de septiembre, en la última reunión de FIFA en Zúrich, el máximo organismo de fútbol internacional a adoptado un cambio sustancial a la hora de reclamar un club la habitual indemnización por los derechos de formación de un jugador y el llamado mecanismo de solidaridad.
Recuerda Fuentes que el derecho de formación, tal y como queda recogido en el artículo 20 del Estatuto de Transferencia de Jugadores FIFA; es la indemnización por formación que se le paga al club o clubes formadores de un jugador cuando este firma su primer contrato de profesional o por cada transferencia hasta el fin de la temporada en la que cumple 23 años.
En el caso del mecanismo de solidaridad, también presente en el artículo 21 del citado Reglamento FIFA; es cuando un jugador es transferido antes del final del vencimiento de su contrato, el club o clubes que contribuyeron a su educación y formación recibirán una parte de la cantidad pagada al anterior club, el llamado mecanismo de solidaridad que FIFA regula y actualiza cada año al igual que los derechos de formación.
Hasta ahora estas reclamación se hacía presentando la correspondiente documentación física donde el club en cuestión presentaba la documentación exigida. Pero todo esto cambia desde el próximo día 1 de octubre.
A partir de esa fecha, todas las reclamaciones deberán hacerse a través del TMS. Esta actualización y informatización busca agilizar las gestiones a la hora de realizar este tipo de reclamaciones. Hasta el punto de que FIFA ha acordado también la creación de una subcomisión específica nombrada por la Cámara de Resolución de Disputas para resolver lo antes posible cualquier conflicto que surgiera al respecto.
