PSG, Marsella y otros cinco clubes impugnan el acuerdo entre la Ligue y el Mónaco

Siete clubes franceses, entre ellos el París Saint-Germain, el Olympique de Marsella o el Girondins de Burdeos, han comunicado que van a impugnar el acuerdo alcanzado por la Ligue1 con el Mónaco para contrarrestar las ventajas fiscales del Principado.

A finales de enero pasado y tras un periplo de varios meses en los que Liga francesa y el Mónaco mantenían un pulso como consecuencia de las ventajas fiscales que el club monegasco mantiene con respecto a los clubes con residencia en Francia, llegaron a un acuerdo en virtud del cual el Mónaco pagaría 50 millones de euros para seguir jugando en el campeonato francés.

El asunto no se presentaba pacífico.

Siete clubes de la élite francesa acaban de firmar un escrito en el que consideran «precipitado y poco transparente» el acuerdo anunciado el pasado día 24 de enero y que hay que «buscar una solución que tenga en cuenta los intereses del conjunto de los clubes y que preserve la equidad deportiva».

Además del PSG, el Olympique y el Girondis, firman el correo el Lille, actual tercero de la liga francesa, el Montpellier, el Lorient y el Caen, estos dos en segunda división.

El detonante

Con la llegada al club del Principado del multimillonario ruso Dmitry Ryboloviev con un proyecto de convertir al Mónaco en un grande de Europa, los clubes franceses estiman que el Mónaco ha sobrepasado la línea roja. No sólo tenía un régimen fiscal diferenciado, que ya era discriminatorio, sino que ese mismo fuero le aportaba unos atractivos superiores para captar inversores. Y dijeron «basta».

Por eso, la Ligue acordó el 21 de marzo de 2013 que todos los equipos que disputaran su campeonato tuvieran su sede social en Francia. Una decisión que, obviamente, iba dirigida al Mónaco, el único que no la tiene. Con ello perseguían que este equipo pagara los mismos impuestos que los demás.

Las negociaciones encallaron con amenazas de acabar en los tribunales hasta que se anunció el acuerdo de los 50 millones, pacto que ahora puede saltar por los aires.