Un grupo de ex presidentes del Elche, liderados por Francisco Borja, presentará el martes con el respaldo de la federación de peñas del club y de la Plataforma Salvemos al Elche un proyecto alternativa a la actual gestión del consejo de administración del club ilicitano.
El acto, que tendrá lugar a las 11.00 horas en el hotel Huerto del Cura, contará con varios ex dirigentes de la entidad ilicitana, como Diego Quiles, Anselmo Navarro, Juan Serrano, Andrés Alonso y Amador Poveda, entre otros, quienes mostrarán su respaldo al plan para reflotar económicamente a la entidad que preside José Sepulcre.
Al acto también acudirán representantes del sector empresarial de Elche, el edil de Deportes, Daniel Rubio, y miembros de las peñas y de la plataforma Salvemos al Elche.
Precisamente, estos dos colectivos, enfrentados hasta hace unos días, han unido sus fuerzas para solicitar de forma conjunta la dimisión del actual consejo de administración del Elche.
Borja, que considera imprescindible realizar una auditoría externa a la entidad, propuso hace un mes un plan económico para sacar al club de la actual crisis financiera en la que se encuentra.
El que fuera presidente del Elche a principios de la pasada década planteó como opción la reunión de 12.000 socios para que a través de créditos bancarios personales y con una amortización de diez años, pudieran aportar mil a 50.000 euros a las arcas de la entidad.
«No creo en los mecenas. Una deuda de cuarenta millones de euros no es cosa de diez personas, sino de toda una masa», afirmó el ex presidente, quien abrió la puerta de su proyecto a Juan Anguix, ex vicepresidente de la entidad, quien abandonó el club hace dos años por discrepancias con el actual consejo.
Borja ya mantuvo una reunión con varios ex presidentes del Elche la pasada semana en la que dieron «luz verde» a la venta del club, aunque siempre que el fondo de inversión comprador fuera fiable y ofreciera garantías de pago.
El empresario ha manifestado en repetidas ocasiones que su relación con Sepulcre es cordial y recordó que tanto él como otros presidentes «tuvieron que dimitir un día para dejar paso a otros»