El TSJC, con fecha 13 de diciembre de 2013, ha ratificado la sentencia del Juzgado de lo Social Número 5 de Santander, que declaró nulo el contrato de Gerardo Pombo, quien fue presidente de la Federación Española de Vela (RFEV) durante casi 12 años, y que había sido nombrado director del Mundial de Vela 2014. La decisión, fechada el 28 de mayo, se basa en la conclusión del juez de que Pombo se «autocontrató», lo que ha llevado a la invalidación del acuerdo y a la negativa de la indemnización de 120.000 euros que Pombo reclamaba.

El contrato, que establecía un salario de 60.000 euros anuales y otros beneficios, fue firmado en septiembre de 2012, en un contexto de cambio en la dirección de la RFEV. A finales de ese año, un nuevo presidente, José Ángel Rodríguez, denunció la contratación y comunicó a Pombo que no contaba con él, lo que desencadenó el conflicto legal.

El juez argumentó que la decisión de Pombo y su entonces vicepresidente, Labat, de formalizar el contrato fue una «autocontratación con intereses propios», y que Labat no tenía la autoridad necesaria para firmar en nombre de la gestora que estaba en funciones durante el proceso electoral. Esta situación ha generado una convulsión interna en la Federación y ha llevado a la dimisión de Labat como miembro de la Junta Directiva.

La sentencia no solo afecta a Pombo, sino que también plantea interrogantes sobre la gestión y la transparencia dentro de la RFEV, así como sobre la organización del Mundial de Vela en Santander. La decisión es recurrible, pero ya ha comenzado a tener repercusiones significativas en el ámbito náutico español.

Con este fallo, el futuro de la Federación y la organización del Mundial de Vela se encuentra en un momento crítico, y muchos esperan que se tomen medidas para restaurar la confianza en la gestión de la vela en España.

Por IUSPORT

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