Esta mañana tuvo lugar en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) de Madrid el acto de conciliación entre AFE y LFP motivado por la convocatoria de huelga realizada por parte del sindicato de futbolistas.
Por parte de la Liga asistió su presidente, Javier Tebas, al igual que la AFE, que estuvo representada por Luis Rubiales, aspecto este nada baladí, pues confirma lo que hemos expuesto en IUSPORT acerca de que todos se «hablan» entre sí, excepto Ángel Villar, que no se habla ni con Tebas ni con Cardenal.
El acto, que duró en torno a dos horas y al que asistió un abogado en representación de la RFEF, terminó con el resultado de «sin avenencia», por lo que, como ya habíamos adelantado en IUSPORT, las partes quedan emplazadas a la vista convocada para este miércoles en la Audiencia Nacional, en la que serán escuchadas antes de resolver acerca de las medidas cautelares (suspensión de la huelga) solicitadas por la Liga.
No obstante la desavenencia sobre la huelga, Javier Tebas manifestó tras la conciliación fallida que «les hemos ofrecido [a AFE] siempre en el ámbito del convenio colectivo que si quieren garantías de pagos mensuales de los clubes a los jugadores estamos dispuestos a ello. También les hemos ofrecido la creación conjunta de un fondo salarial para ayudar a los jugadores más modestos»
La Asamblea Extraordinaria de la Liga de Fútbol Profesional celebrada ayer lunes había enviado un mensaje contundente a la RFEF y a la AFE que hacía presagiar el resultado del acto de conciliación ante el órgano arbitral de este martes.
El mensaje más importante que le transmitió a la AFE, y también a la RFEF, es que no hay nada que negociar sobre la supuesta modificación del Decreto-Ley, cuestión sobre la que entiende que ninguno (RFEF, LFP y AFE) está legitimado. Se trata, dicen, de algo que excede a las competencias de unos y otros. Es el Gobierno quien ha dictado el Real Decreto-Ley, no la Liga, recuerdan con cierta sorna.
La Asamblea lo dejó claro cuando reiteró su respaldo «incondicional» el Real Decreto-Ley, expresión que denota su oposición a negociar sobre el mismo.
No obstante, la Asamblea autorizó a su presidente a «mantener un diálogo, constante, continuo y fluido» tanto con la RFEF como con la AFE, pero siempre en el marco de los convenios que la LFP tiene suscritos con ambas partes. La Asamblea de la Liga dejó clara su postura de no entrar a negociar la modificación del Real Decreto-Ley sobre los derechos audiovisuales.
El mismo miércoles tendrá en el Congreso de los Diputados el pleno que votará la convalidación del Decreto-Ley audiovisual.