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Como avanzábamos el pasado 19 de marzo en IUSPORT, medio año después de su nombramiento como capitana del equipo español de Copa Davis, el caso Gala León continúa enconado a escasos meses de su debut en el cargo, que en teoría habrá de producirse en julio próximo en el encuentro Rusia-España por un puesto en el Grupo Mundial del torneo.
El Consejo Superior de Deportes (CSD) requirió a la Real Federación Española de Tenis (RFET) que acreditara la fórmula que se utilizó para nombrar a Gala León ante las sospechas de que no se produjo mediante la preceptiva votación en Junta Directiva.
En concreto, el CSD ha requerido a los responsables federativos para que entreguen las actas «literales» que recogen la elección de Gala León.
El vicepresidente primero de la RFET, Fernando Fernández-Ladreda, consideró que esta petición es «una estratagema más de Miguel Cardenal para cesar a la primera mujer capitana de una selección masculina de primer orden, nombramiento cuya repercusión alcanzó incluso un diario del prestigio del New York Times».
Además, la Federación respondió enviando meros certificados de las actas y solicitando audiencia al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, «ante el intento de Miguel Cardenal de destituir a Gala León».
El CSD considera que el certificado no está firmado por órgano competente, ya que, según informa ABC, está expedido por el director general de la Federación, Marcos Romagosa, entre cuyas funciones no figura la de expedir certificaciones. Esta función le corresponde al secretario general, que en el momento en que se produjeron ambas reuniones era José Pedro García Fernández, presidente del Club Atlético Montemar de Alicante, quien según ha podido saber ABC, ha dimitido de su cargo como secretario general de la Federación.
El CSD quiere que la Federación acredite, mediante las actas de la reunión, si el nombramiento de Gala León fue aprobado en votación por la Junta Directiva o fue una decisión del presidente, como han denunciado las Federaciones de Castilla y León y de Aragón. Estas territoriales denuncian que el nombramiento «no se ajusta a derecho», pues creen que León fue designada directamente por el presidente de la Federación, José Luis Escañuela, y no por la Junta Directiva, como ordena el artículo 39 de sus Estatutos.
Según las territoriales, la Junta del 21 de septiembre pasado ofreció la renovación a Carlos Moyá y, ante la negativa de éste a continuar en el cargo, Escañuela nombró directamente a Gala León, en ese momento directora deportiva de la Federación.
El 21 de octubre pasado los tenistas se reunieron con Gala León y le pidieron que dimitiera como capitana porque, a su juicio, no conoce lo suficiente el circuito masculino y nunca ha entrenado al máximo nivel, argumentos rechazados por la capitana, que apreció un matiz machista. «No voy a pedir perdón por ser mujer», llegó a decir.
El Gobierno, en su respuesta al senador Quintero, consideraba, en cambio, que «en relación con el debate generado por la designación de Gala León, los tenistas ya han manifestado públicamente que se ha centrado en criterios deportivos y no de género».
Desde Indian Wells (California), Rafael Nadal, preguntado recientemente por EFE, ha vuelto a opinar sobre el asunto. «En el deporte tiene que estar gente que sabe de deporte, que entienda. Es como si me pones a mí de director de un hospital. No sé de Medicina, no sé cómo funcionan las cosas», manifestó.
