El fin de la era de los Agentes FIFA

Los casi más de veinte años de vigencia del Olimpo de las grandes comisiones en las operaciones de futbolistas, llega a su final, al menos, como se ha dado hasta ahora.

Como es de sobra conocido, la actividad de los Agentes FIFA ha tomado un peso indiscutible en el tráfico de operaciones de futbolistas, ejerciendo un papel principal en materia de negociación de transferencias, y por consiguiente, de comisiones o primas, que no ha sido abarcada de lleno hasta ahora.

La propia FIFA, que lleva años detrás de este tema, ha decidido dar un golpe de autoridad ante un inmenso mercado que se le ha escapado de su control. Por ejemplo, sólo en el pasado año 2013, se realizaron más de 12.000 transferencias en todo el mundo, y exclusivamente el mercado inglés, se invirtieron más de 900 millones de dólares. 

Como punto de partida, en nuestro país no tenemos una normativa jurídica de carácter público que regule y vincule a la Ley la figura de los Agentes de futbolistas (ni siquiera en otros deportes). Es por ello que ha sido hasta ahora un tema rico para la jurisprudencia, siendo eventualmente contencioso. Los Tribunales, a través de pronunciamientos han tratado de encajar esta actividad en otras formas afines a la actividad de los Agentes de futbolistas; como la mediación, la representación, los contratos atípicos, etc.  Nuestra doctrina ha ido aislándola casi unánimemente de la caracterización de colocación laboral, y aproximándola más a las citadas relaciones mercantiles y civiles.

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