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El colectivo arbitral ha hecho público un comunicado en el que denuncian que Ramón Granados, Presidente de la Federación de Baloncesto de Castilla-La Mancha, ha faltado a su palabra. Según el comunicado, en la reunión mantenida con el ya ex Director General de Deportes, Juan Carlos Martín, Granados aseguró que los pagos se llevarían a cabo «antes de finalizar la temporada o en un máximo de cuatros meses», lo cual, no ha ocurrido según afirman los árbitros.

 

Los afectados aseguran que el Presidente había reconocido una deuda aproximada a los 600.000 euros que se había ido acumulando entre los años 2011 y 2015 y que, a pesar de su promesa de regularizar la deuda, los árbitros siguen sin cobrar. 

 

La situación de malestar entre el colectivo arbitral es tal que afirman haberse sentido insultados y manifiestan su intención de seguir en huelga hasta que se les abonen las cantidades que les adeudan aunque, declaran en su comunicado, su única intención con esta huelga es «conseguir un baloncesto transparente, digno y que nos permita representar a Castilla-La Mancha por toda España con la cabeza alta y no sumidos en la corrupción y los desafíos dictatoriales del que somos presos».

 

Por último, el colectivo arbitral no se ha callado el malestar que le ha causado el silencio que ha mantenido la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha hasta ahora, por lo que se han mostrado esperanzados y confían en que el nuevo Director General de Juventud y Deportes, nombrado en el Consejo de Gobierno de ayer, José Antonio Pecharromán, «se tome más en serio el tema».

 

 

 

Por IUSPORT

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