Y es que las federaciones territoriales andan que trinan tras el escrito que les ha circulado la Agencia Tributaria solicitando datos minuciosos de los árbitros adscritos a categorías no profesionales.
La Oficina Nacional de Investigación del Fraude, dependiente de la Agencia Tributaria, ha dirigido un escrito, fechado el 20 de marzo pasado, a todas las federaciones territoriales de la RFEF en el que las insta a remitir información detallada sobre los árbitros que actúan en Segunda B y Tercera, así como en fútbol sala, tanto masculino como femenino.
El pasado día 2, IUSPORT daba cuenta, en absoluta exclusiva, del citado escrito en el que se requiere diversos datos de los colegiados que han intervenido en las referidas categorías y las cantidades abonadas a los mismos en los ejercicios 2011, 2012 y 2013.
Diversas fuentes de las Territoriales consultadas por IUSPORT han manifestado que por ese camino será imposible alcanzar un pacto sobre las cuestiones que actualmente le distancian del CSD. Lo cual afecta, por efecto dominó, al pretendido -por la Liga- Real Decreto-Ley audiovisual.
Como saben los asiduos lectores de IUSPORT, las negociaciones sobre el Real Decreto-Ley están estancadas tras la negativa de la RFEF a abordarlo sin resolver al mismo tiempo los asuntos del deporte aficionado.
Pues bien, a la vista de las nuevas inspecciones de Hacienda, esta vez a los colegiados, desde las Territoriales se entiende que no existe voluntad política -del Gobierno- para negociar, y se señala a Miguel Cardenal como responsable de lo que acontece, no tanto porque haya propuesto esas inspecciones, extremo que se ignora, sino por no haberlas parado, al menos hasta que se cerrara un acuerdo de principios.
No entienden en las Territoriales que Hacienda haya puesto sus ojos en sus colegiados, que se encuentran en la base de la pirámide, y menos aun que se haya ordenado a través de la Oficina antifraude, pensada obviamente para causas mayores.
Además, recuerdan que desde la propia Inspección de Trabajo se ha declarado que los árbitros del deporte quedan fuera del régimen de la Seguridad Social, por lo que resultan especialmente llamativas las nuevas inspecciones tributarias.
Por cierto, no hace falta recordar las buenas relaciones existentes entre Villar y Sánchez Arminio, el presidente del Comité Nacional de Árbitros.
